Urkizahar: el terruño como protagonista

Urkizahar: el terruño como protagonista

Bodega Urkizahar

Urkizahar, «abedul viejo» en euskera, es el proyecto que nace de la mano de Luis Javier Oregi y de Igone Arruti en el municipio de Beizama a las faldas del monte Illaun en el macizo de Murumendi, durante el año 2007.

Cuenta con 2,5 Ha., la mayoría con la variedad Hondarrabi Zuri y una pequeña proporción de Chardonnay, tratadas en ecológico en uno de los viñedos situados a más altitud, 450 msm, de la D.O. Getariako Txakolina, cayendo en pendiente pronunciada hacia el embalse de Ibai-Eder.

En el 2016 abandona la elaboración del txacolí en las bodegas de Getaria que había realizado desde 2012, y nace la primera añada elaborada ya en el caserío restaurado de Beizama.

Alejada de la costa y con una pluviosidad similar, la influencia de los vientos hace que le llegue tanto el aporte cálido del sur, clave para una perfecta maduración, como la llegada de la influencia marina que se hará notar en el aporte aromático y gustativo del txacolí, aunque con la amenaza de ataques de mildiu y oidio.

Urkizahar

Elaborado en un 100% con uva Hondarrabi Zuri. 11% vol. PVP 10 €

La vendima se realiza de forma manual, pasando a ser despalillado el racimo y realizando un prensado del que se utiliza sólo el mosto flor que cae por gravedad. El mosto realiza fermentaciones espontáneas a baja temperatura en depósitos de acero inoxidable y embotellándose el verano siguiente a la fecha de la vendimia. Certificado Ecológico.

Urkizahar 2016

2016. La cata:

Llamativo color amarillo pajizo-acerado con ribetes verdosos y una finísima burbuja en suspensión. Atractivo.

Aromas en los que predominan los aportes frutales (manzana) conjuntados con recuerdos de flores blancas, notas cítricas, sutiles apuntes salinos,no tan marcados como en los txakolís de «costa», y toques minerales.

Boca con muy buena acidez que no llega a ser agresiva -a mi me encanta-, pero marcada. Fresco y muy agradable entrada en boca con un sutil carbónico.

Elegante, complejo, redondo y, a pesar de esos 4 años, sigue manteniendo potencia, volumen y con un cromatismo que para nada anuncia esos vejez.

Urkizahar 2017

2017. La cata:

Bonita vista con color amarill-verdoso. Acerado. Limpio y brillante.

Aromas a fruta blanca (manzana), recuerdos de pera, sensaciones de flores blancas, toque cítricos y minerales (arenosos-calizos) y recuerdos salinos.

Boca marcada por una excelente acidez, fresco y con un carbónicos sutil y elegante.

Muestra amplitud y potencia junto con una retronasal compleja en la que se remarcan las sensaciones frutales, florales, minerales, cítricas y salinas.

Buen recorrido de mediana intensidad y con un final ligeramente amargo muy bien conjuntado con el aparte cítrico.

Excelente. Muestra más nervio y potencia que 2016. Un potro por domar.

Urkizahar 2018

2018. La cata:

Precioso color amarillo-verdoso más intenso que en añadas anteriores. Limpio, brillante, acerado y con microburbujas de carbónico vivas, aunque sin hacer corona.

Nariz marcada inicialmente por la fruta blanca, aunque se muestra uraño hasta que en agitación comienaza a desplegar un abanico de aromas de flores blancas, cítricos y recuerdos anisados, dejando las notas salinas en un segundo lugar.

Boca con una acidez más comedida que en añadas anteriores (ese grado de más se deja notar).

Fresco, con más volúmen que el 2016 y 2017. Largo y con más untuosidad, aunque muestra un punto de golosidad que no he observado anteriormente. Elegante.

Retronasal con más sensaciones florales y frutales que en añadas anteriores, dejando en un segundo planto el amporte mineral. Ligero amargos final junto con notas anisadas. Muy rico.

No hay tops

Me preguntaba un seguidor en instagram cuál era el top de la cata y le remití a este post, ya que, para mí no hay ninguno y lo son todos.

Respuesta un tanto a la gallega, pero que incide en la diferencia de los vinos, no en su elaboración, sino en uno de los componentes básicos y a  la vez esencial: el terruño.

Luisja e Igone consiguen con su trabajo en bodega respetar y preservar el aporte de casta, suelo y clima que  marcarán  las diferencia entre cada una de las añadas.

El 2016 es el más redondo y, podemos decir, que se ha «domesticado» ya que el tiempo ha jugado a su favor. Adicez más matizada, carbónico sutil y prácticamente imperceptible, más elegante en su conjunto. Un top.

El 2017 ha sido de los tres el más «salvaje». Acidez más marcada, sensaciones salinas y minerales más acentuadas sobre el aporte floral y frutal. Muy en línea de un txakolí serio, vivo y potente. Un top.

Y por último, el 2018 ha sido el que se ha visto más afectado por el clima. Ese grado de más lo delata y deja su impronta en esa untosidad, esa acidez más suave, ese aporte floral y frutal predominando sobre el componente mineral que nos habla de una madurez fenólica más completa. Un top.

Algún enochalado de los que nos siguen pregunarán por el Urkizahar 2017 Edición Limitada, pero al «jugar en otra liga» le dedicaré un post para él.

Espero que hayan disfrutado y, si no los conocen, se animen a disfrutarlos. Me lo van a agradecer, estoy seguro.

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¡Salud y buen vino!

lmanol Garay: Entre Vizcaya y Madiran

lmanol Garay: Entre Vizcaya y Madiran

Imanol Garay

Diplomado como Ingeniero Químico Industrial en la Universidad de Pau, trabajó entre 2007 y 2016 como técnico comercial de la Tonelería francesa Adour para Francia y Suiza, donde adquiere la experiencia determinante en la definición del vino que quiere hacer, fruto de sus numerosos encuentros con productores abiertos y sensibles así como en el conocimiento de vinificación y crianza.

En 2007 plantó una pequeña viña de Cabernet Franc en su residencia de Orthez y, en 2012, elabora su primer vino “Abiatu” en colaboración con un amigo, en la denominación de Madiran (Suroeste de Francia), zona, que como bien dice el maestro Juancho Asenjo en un excelente artículo en elmundovino.com, es una zona vecina muy injustamente desconocida.

En 2013 elabora por primera vez “Ixilune” un magnífico blanco seco de Pacherenc de Vic-Bilh con Petit Courbu y Petit Mansen.

En el año 2014, la gama crece en torno a la temática de vinos del “Piamonte” Pirenaico -Camino de Santiago proveniente de Italia- elaborando esta garnacha de zona fría procedente de la Sierra de Izco (Navarra), con un perfil más fresco y floral del habitual. El vino lo lleva a Francia dónde realiza la crianza. Una parte lo embotella como Clandestinus y la otra parte terminará la crianza en ánforas de grés de 60l. llamado Clandestinum.

En 2016 planta su primera viña oficial, 0,75 Ha. de variedades blancas en St Etienne de Baigorry, en la AOC Irouleguy (Pais Vasco francés), sobre parcela de “ofitas” -rocas ígneas volcánicas que dan lugar a rocas ligeras-, fuerte pendiente (40-50%), densidad 6.000 pies/ha, en agricultura biológica. Y próximamente dará a luz nuevos proyectos como un nuevo Txakolí en colaboración con una bodega de Bizkaia.

En el 2017 aúnan fuerzas Imanol Garay y Oxer Bastegieta y deciden hacer un vino juntos pero con variedades de ambos lados de la frontera. Bi-Xori 2017 de garnacha blanca, garnacha, tempranillo, viura, tannat, cabernet franc, petit manseng y petit courbu.

Los vinos de Imanol.

Clandestinus - Imanol Garay

1.- ClandeStinus 2018

Variedades : 85 % Grenache noir – 15 % Pinot Noir

Suelos pardos calizos en zona de Estella con las influencias atlánticas y pirenaicas

Fermentaciones espontaneas en inox realizadas en Estella. Selección y ensamblaje de los depósitos para transporte a bodega.

Crianza después de maloláctica en barricas de 228, 700 y 600 L , en inox y un poco en ánforas de gres, durante 9 meses. Embotellado sin filtración y sin añado de sulfuroso (solo 3 g/hl después de maloláctica). Alc 13,5 % / SO2 total 35mg/l

La cata:

Atractivo color picota de capa alta con ribete carmesí y lágrima fina. Paleta de aromas que desarrollan sensaciones de frutas rojas y negras acompañadas de aportes balsámicos, tinta china, flores azules (violetas) y punta de verdor que no molesta, recuerdos minerales de café y cacao. En boca muestra una buena acidez, frescura y buen recorrido.

La Altannativa 2018 - Imanol Garay

2.- Altannativa 2018

 Variedades de uva: 94% Tannat (comuna de Soublecause-65), 6% Petit courbu

Suelos: guijarros y arcillas expuestas al este.

Cosecha: 2 y 8 de octubre para Tannat. 27 de octubre para los blancos.

Rendimiento: 15 hl / ha vinculado a la siembra, y una fuerte presión de mildiu en 2018.

Vinificación: 80% prensado directo y 20% de tinto macerado (Abiatu). No SO2. Ligero trasiego estático de dos horas. y se deposita el mosto con turbidez significativa en barricas de 300 l. y 225 L de tres a 5 vinos. Inicio espontáneo de la fermentación después de tres días en levadura nativa. El 20% del tannat restante realizó en una maceración de 15 días.

Envejecimiento: Envejecimiento en lías totales sin trasiego. Asemblaje en tinas despues de 10 meses. Ligero sulfito debido al ensamlage (1,5 g/hl) en agosto de 2019.

SO2 total: 15 mg / l / Alc: 14% / pH 3.35

La cata:

Tonalidad rubí abierto de color con menisco rosáceo. Lágrima fina y lenta. Atractivo. Aromas a naranja sanguina acompañados de frutas rojas -fresas, frambuesas-, florales -rosas- y un punto metálico. Boca con buena acidez, ligero y con una densidad perfilada en verticalidad con un punto secante, goloso y directo. Mediano recorrido.

Abiatu - Imanol Garay

3.- Abiatu (Tomar el camino de…) 2017

Variedades de uva: 95% Tannat. Pies de 40 años, 5% Cabernet Franc de 60 años.
Suelo: parcela de arcilla y guijarros expuestos al sur en la comuna de Soublecause – Altos Pirineos –
Cosecha: del 1 al 10 de octubre. Manual en cajas de 13 kg. Vinificación en Soublecause
Rendimiento: 25 hl / ha
Vinificación: despalillado, sin trituración, luego en barriles abiertos de 600, 700 l. y en 225 l de varios vinos.

Fermentación con levaduras autóctonas de fermentación espontánea de vino blanco (Ixilune). No se agregó SO2.

Maceración de 1 semana para la última cosecha y 20 días para la más temprana con 1 pigeage cada dos días. Flujo y prensado

Envejecimiento y embotellado: en barriles de 228 l y ánforas de arenisca (30% la cuvée) durante 18 meses con 2 estanterías. Embotellado en el sótano a las Maslacq -64. Sin filtración No hay SO2 en juego. SO2 total: entre 20 y 30
mg / l – Alc. 13,5% –

La cata:

Precioso color picota intenso y de capa media-alta con ribete carmesí. Lágrima fina y densa.

En nariz hay que darle tiempo para que nos descubra los aporte aromáticos iniciales a notas minerales que van de la arenisca al granito y terminan con el pedernal que se ven acompañados por aportes de fruta roja y negra (mora, grosella y arándanos). Recuerdos de especias, pólvora, tabajo y toques balsámicos.

En boca muestra muy buena acidez y sensaciones inicales de carbónico que desparecen en agitación de copa. Taninos rugosos, pero no agresivos aportados por el hollejo que se deja notar en las encías. Buen paso de boca, fresco y de buena intensidad y recorrido.

Retronasal en la que la complejidad olfativa vuelve a desplegar su paleta aromática.

Vino de guarda y para disfrutarlo sin prisa. Distinto, personal y atractivo, aunque tal vez no sea un vino para todos los gustos.

Bi-Xori - Imanol Garay

4.- Bi-Xori (Dos pájaros) 2017

 Variedades : Imanol aporta una mitad con las variedades cabernet franc, tannat, petit courbu y petit manseng de la zona de Madiran (suelos de arcillas y cantos rodados) y la otra mitad, aportada por Oxer Bastegieta, la forman uvas de garnacha de viñas de la Rioja Alavesa de 1903, tempranillo de la Rioja Alta, garnacha blanca y viura de Rioja de suelos arcillo-calcareos .

Vendimias del 1 a 10 de octubre en Madiran y del 5 al 15 de octubre en Rioja. Vendimia manual en cestas.  Rendimientos en torno a 25 hl/ha

Vinificación :

Parte Madiran : despalillado sin estrujado, dentro de barricas abiertas de 600, 700 y 225L. Sin sulfuroso ni sembrado. Tiempos de maceración de 10 a 20 días en función de la madurez de las uvas. Descubado, prensado y ensamblaje de prensas junto con la rama y las variedades blancas. Crianza en barrica de 700 L durante 15 meses.

Parte Rioja : Despalillado y fermentaciones espontáneas en tinos de madera y « huevo » de cemento para la garnacha. Crianza en barricas de 500 l para el tempranillo y en huevo de cemento para la garnacha durante 8 meses. Ensamblaje en barrica de 600 L para proseguir la crianza 7 meses.

Una vez estan en barrica se produce el ensamblaje en la bodega de Imanol en Maslacq, aunando las dos partes para terminar la crianza en las dos piezas de 600 y 700 L durante un mes más.

Embotellado sin filtración. Alcool : 14,5% / pH 3,6 / SO2 total 25mg/l

La cata:

Picota de capa alta y menisco carmesí. Lágrima fina y densa.

Aromas cargados de fruta negra, tabaco, cacao y aporte mineral.

Boca en la que se deja notar la tanicidad aportada por las variedades. Sedoso, fresco, con tensión y de mediano recorrido.

Vino atípico en cuanto a composición y elaboración que me recuerda a una buena pieza de jazz en la que las aportaciones del piano y el saxo necesitan del bajo y la batería para conseguir un buen swing. En este caso castas y terruño consiguen el efecto deseado bajo las elaboraciones de Imanol y Oxer.

Con todo es un vino muy interesante al que habrá que seguir ya que, como bien dice el maestro Ted Gioia hablando de jazz, «aunque las notas que toquen sean diferentes, las estructuras rítmicas suelen ser idénticas».

Ixilune - Imanol Garay

5.- Ixilune (Momento de silencio) 2016 y 2018. Vin de France. 1600 Bouteilles Produites

Variedades : 70 %petit Courbu (en Aydie -64), 30 % petit Manseng (Soublecause-65). Zona de Madiran- Pacherenc de Vic-Bilh

Conducción : trabajo del suelo un rango de dos. Enrollado de los sarmientos de petit courbu para evitar el despunte. Deshojado ligero de las  mas oscuras.

Suelos : arcillas y cantos rodados expuestos al este en el petit courbu, cantos rodados al sur en petit manseng

Vendimia: 25sept para petit courbu, 2 octubre petit manseng. Manual en cajas de 13 kg.

Rendimientos de 15 hl/ha petit courbu y 20 hl/ha en petit manseng

Vinificación : Maceración con raspón de una semana en barrica abierta del 20 % del petit courbu, que ha sido prensado posteriormente junto con el petit manseng. Para el resto, prensado directo y ensamblaje de prensas con flor. Oxidación voluntaria del mosto. Desfangado estático sin sulfuroso durante 4 h ; Encubado con alta turbidez en barricas de 500l, y de 225 . Fermentación espontánea sin sulfuroso.

Crianza : FA larga y no terminada, malolactica completa. Crianza con lías totales sin trasiego. Ensamblado septiembre 2019. Ligero sulfitado en el ensamblaje (2g/hl)

Azucares reductores en el embotellado de noviembre 2019 : 19 g/l

Embotellado con corcho natural y chapa en previsión de una refermentación natural. En tal caso, hablaremos de un espumoso natural…

La cata:

El 2016 presenta un color amarillo con ligera turbidez, pero atractivo.

Sensaciones aromáticas en las que aparece al miga de pan, las notas de frutos seco, recuerdos salinos y ahumados junto con puntos cítricos y piel de limón.

Boca con muy buen acidez y recorrido. Un vino con personalidad que me ha encantado.

El 2018 muestra un color amarillo dorado, limpio y brillante.

Aromáticamente el protagonismo es de la fruta amarilla (membrillo) acompañada por los recuerdos cítricos, sensaciones de fruta blanca  (pera).

En boca  presenta un buen volumen y excelente acidez. Es envolvente, largo y adictivo. Excelente.

6.- Hegan Egin (Volar) 2018

La historia de 3 tipos, o mas bien la historia y el retrato de un lugar contada por estos tres individuos : Gile Iturri, Alfredo Egia e Imanol Garay.

 Variedades : Petit Coubu y petit manseng (50-50%) . Viña de Alfredo Egia, situada en Balmaseda (25 km suroeste de Bilbao).

Suelo pobre poco profundo de cayuela (esquistos y gres con rocas areniscas), orientada al sur y pendiente del 30%.

Vendimia el 4 de octubre manual en cajas de 15 kg. Rendimiento de 20 hl/ha. Uva dorada por las condiciones calidas y solares de septiembre 2018

Vinificación y crianza : en Bodegas Bizkai-Barne-Orozko. Prensado directo y desfangado ligero de 2 h, entonado en barricas de roble Francés nuevas, de tres y 5 años de 225, 300 400, y 500 L , siempre llenos inox, y en ánforas de gres (15%) para una fermentación espontánea. Larga fermentación de 7 a 10 meses con maloláctica completa y solapada. Una de las barricas ha seguido una crianza oxidativa sin rellenos.

La cata:

Precioso e intenso color amarillo con ligera turbidez.

En nariz necesita aireación para desplegar la batería de aromas que atesora con sensanciones anisadas, recuerdos de bollería fina y un punto salino acompañados por toques de pomelo.

En boca muestra volumen, estructura, peso en boca, largo en recorrido y un amargor final que lo hace aún más adictivo. Excelente.

Imanol Garay

Nunca he llegado a comprender a aquellas personas a las que les gustan los vinos «monolíticos», sin cambios añada tras añada y sin mostrar el origen de dónde vienen, no ya por aburrido sino porque, en mi opinión, demuestra el escaso interés por ampliar conocimientos y ese hecho perjudica nuestra cultura vinícola.

En mi caso, y doy fe en mis post publicados, defiendo siempre la «mente abierta» a la hora de probar y comentar vinos. Utilizando una frase de una de mis películas favoritas, Blade Runer, deberíamos de ir «más alla de Orión» o ver «brillar en la oscuridad cerca de la Puerta de Tannahäuser«, en una palabra, no dejarnos encorsetar o temer el poder disfrutar con vinos que quizás no se ajustan a nuestros parámetros de gusto, pero que mercen el riesgo con el fin de generar una opinión.

Imanol Garay elabora, en mi opinión, excelentes vinos en los que podemos observar la combinación del «efecto terrorir» o del «efecto coupage» junto con lo que yo denominaría el «efecto vigneron«, es decir, la personalidad de quien los elabora, que no te deja indiferente y eso, para mí, es un tanto a su favor.

Huyo de los vinos aburridos, preconcebidos, establecidos por moda, alejados de la sostenibilidad, del terroir y del viñador. Y por eso gran parte de los vinos que comento y disfruto mantienen alguna de esas premisas, si no todas.

¡Intenten llegar a Orión o acercarse la Puerta de Tannahäuser!. Seguramente no lo lograremos, pero en el viaje seremos libres y lo haremos sin miedo, lo que significa que no somos esclavos.

¡Salud y buen vino!

Fotos de Imanol Garay y autor.

De copa en boca: AMA 2015

De copa en boca: AMA 2015

Bodega Gorka Izagirre.

En pleno vallde de Asúa (Vizcaya)  nace en el 2005 un proyecto en el que se aúnan el mundo del vino, con la Bodega Gorka Izagirre, y el mundo de la gastronomía de la mano de Eneko Atxa.

En la actualidad cuentan con colaboración de 25 viticultores, distribuidos por varios municipios, que aportan sus 40 hectáreas, plantadas con las castas Hondarrabi Zuri y Hondarrabi Zerratia bajo el sistema de espalderas especialmente altas y divididas en pequeñas parcelas marcadas por las fuertes pendientes orientadas al SE buscando el sol de la mañana, para eliminar cuanto antes el rocío vespertino, y la deseada aireación.

En bodega se vinifica cada parcela y cada variedad por separado buscando las diferencias de cada zona buscando la personalidad y el carácter que en el resultado final, en el vino, aporta la terna casta-clima-suelo.

El vino.

AMA, «madre» en euskera, es una selección de Hondarrabi Zerratia (Petit Corbu) de la viña Astorkeka con 1,8 ha.

Vendimiada el 23 de octubre de 2015 es una de las cosechas más cálidas que se recuerdan. Rendiemiento 4.000 kg/ha. D.O. Bizkaiko Txacolina.

En su elaboración se parte del mosto lágrima que se fermentó un 90% en acero inoxidable y un 10% en barrica nueva de roble francés de grano fino. Posteriormente tras una crianza con lías de 2 meses se realiza un coupage con los vinos resultantes para que maduren durante 22 meses. 13,5% vol.

Finalmente se embotelló el 21 de diciembre de 2017 obteniéndose 5.160 botellas de 0,75 cl. y 418 botellas magnum. PVP: 34 €, pero la Relación – Precio – Disfrute es realmente excelente.

La cata.

Destaca por su preciso color amarillo verdoso, limpio y con lágrima fina y densa.

Aromas complejos con una paleta aromática de sensaciones cítricas, fruta amarilla, mantequilla y brioche, flores amarillas (acacias y cala), recuerdos minerales (pedernal), apuntes de hidrocarburos y toffe y una gran intensidad.

En boca presenta un excelente ataque, fresco y con muy buena acidez, sensación de volúmen, largo, elegante y muy disfrutable.

Retronasal compleja con sensaciones ahumadas elegantes y muestras de tener muy buena longevidad que nos hará volver a recatarlo.

Excelente vino que refuerza la idea inicial de la bodega en elaborar vinos «txacolís» que apuesten por la longevidad y mejora en el tiempo. Espero tener la oportunidad de volver a catarlo para confirmar los buenos mimbres y sensaciones que aporta este AMA 2015.

Sin duda, los que los tacharon en sus inicios de elaborar txacolís «viejos» tendrán que retractarse en sus afirmaciones y comprobar en la elegancia, el volumen, la untuosidad, complejidad y recorrido no están reñidos con las castas autóctonas para dar lugar a excelentes vinos.

No es la primera vez que cato vinos de esta bodega ni de la zona y los tenéis en el blog por si os interesan. Con indicar en el buscador «txacolí» los tenéis todos.

Como estamos en Semana Santa y aunque estemos confinados, si pueden hacerse con alguna botella, pueden acompañarla con un buen potaje de vigilia y luego me cuentan.

¡Salud y buen vino!

Fotos de la Bodega y autor.

De copa en boca: Sí o Sy 2015

De copa en boca: Sí o Sy 2015

Hoy quiero compartir con vosotros en esta tercera semana de confinamiento por causa del coronavirus un vino elaborado por Bodegas y Viñedos del Jalón con uvas 100% syrah provenientes de viñas plantadas en laderas de entre 650 y 1050 msm sobre suelos de pizarras enmarcadas dentro de la D.O. Calatayud.

Vinificación: Suave prensado. Maceración en Frío. Fermentación en tanques de inoxidable y a temperatura controlada de 22ºC durante 20-30 días. La fermentación maloláctica se realiza en depósitos subterráneos en contacto con sus burbas finas (conjunto de materias sólidas contenidas en el mosto: trocitos de raspones y hollejos, pepitas, etc. y que no suponen normalmente más del 1% del peso del mosto).

El vino ha realizado una crianza de 6 meses en barricas de roble francés. 14% vol. Temperatura de servicio recomendada entre 16º y 18º C. PVP sobre los 10€ (en mi opinión, una auténtica ganga si hablamos de Relación Calidad-Precio-Disfrute).

La cata:

El vino, dentro de lo que la bodega denomina Las Pizarras colección, muestra una preciosa vista color picota de capa alta con ribete carmesí. Intenso, limpio y con lárima fina y densa. Muy atractivo.

Aromas intensos de fruta roja y negra acompañados de sensaciones balsámicas (regaliz), aportes florales (violetas), ligeros apuntes tostados y recuerdos de cacao, mentolados y especiados.

En boca tiene buen ataque. Fresco, con volumen e intensidad. Muy equilibrado y con un recorrido que muestra un tanino goloso y con cierta rugosidad. En retronasal se muestra un predominio de las sensaciones especiadas y balsámicas que son acompañadas por aportes minerales.

Lo dicho, un vino realmente muy disfrutable y que acompañará en estos días de reogimiento -obligatorio- a quesos, guisos, estofados y carnes a la brasa.

¡Salud y buen vino!

De copa en boca: Sa Rota Reserva 2009

De copa en boca: Sa Rota Reserva 2009

La historia.

La historia nos habla de la existencia de la posesión de Sa Torre hacia el año 1369 y que el amo de la posesión la mandó construir cuando vio cumplido su deseo de tener un varón, siendo conocida en la isla por la singular capilla de estilo neogótico levantada en sus inmediaciones y que preside los terrenos que se extienden entre Llucmajor y el Cap Blanc.

Todo empezó cuando Miguel Sastre Bordoy adquirió en 1.993 las parcelas «Els camps de Sa Vinya» y «s’Aujub Vermell», pertenecientes a la finca «Sa Torre» con la ilusión de que aquellas tierras que habían cobijado a las viñas siglos atrás fueran de nuevo un viñedo.

El viñedo consta de 20,6 hectáreas y está estructurado en trece parcelas, según tipo de suelo, variedades y año de plantación. Cultivamos variedades locales mallorquinas junto con otras foráneas. Como variedades tintas cultivamos Callet, Gargollassa, Cabernet Sauvignon, Merlot y Syrah. Como variedades blancas contamos con Prensal Blanc, Giró Ros y Chardonnay.

El clima.

El clima de esta zona es de carácter mediterráneo semiárido y guarda sus peculiaridades. Estamos en la parte más árida de la isla, con una pluviometría muy baja y una fuerte insolación que beneficia a la viña con producciones más bajas pero de mayor calidad. Los inviernos son ligeramente fríos, con una pluviometría que oscila entre los 300 y los 400 mm/año y los veranos son secos y calurosos, con valores medios de irradiación solar que superan las 2.800 horas al año.

El suelo.

El viñedo está situado en plena marina de Llucmajor (Mallorca). La proximidad del mar supone una gran influencia para los suelos, que a poca profundidad están formados mayoritariamente por “terra de marès” que es un tipo de roca arenisca que se forma por litificación de las dunas marinas.

Estas rocas están formadas principalmente por pequeños fragmentos de fósiles con cementación caliza. Otras veces presenta mezcla de arenas y conchas fósiles, llegando a veces a encontrarse estratos puramente formados por conchas fósiles. Estas características del suelo permiten un buen drenaje, y esto, junto con la escasa presencia de materia orgánica y la facilidad de penetración radicular, hace que el cultivo de la vid se realice en condiciones optimas obteniendo bajas producciones de uva.

Sa Rota Reserva 2009.

Las rotas o rotes eran parcelas de bosque, monte o erial, con una extensión de una cuarterada y dependiente de una posesión. En los siglos XV y XVI se encuentran ya documentos referentes a la existencia de rotes y roters en la zona de la Marina de Llucmajor. Los roters eran los campesinos que cuidaban y cultivaban esas parcelas a cambio de dar parte de la cosecha al propietario de la finca. Las viñas de Bodegas Bordoy se encuentran en una de esas rotes que antiguamente pertenecían a la finca de Sa Torre.

La cata:

Sa Rota reserva 2009 elaborado por Bodegas Bordoy con las uvas syrah, merlot y cabernet sauvignon dentro de la D.O. Pla i Llevant.

Envejecido durante 24 meses en barricas de roble y con un 15% vol.

En vista presenta una preciosa vista de color rubí de capa media con un ribete atejado, muestra de que la evolución cromática en el tiempo va dejando su huella. Lágrima fina y lenta.

En nariz se muestra complejo, presentando aromas limpios de fruta negra compotada acompañada de sensaciones de flores azules, cacao, apuntes balsámicos y recuerdos especiados, cuero, humo y notas de tinta china.

Boca elegante, fresca y con buen ataque en el que aún se muestra el tanino un «pelín» secante y agresivo, pero con muy buenas sensaciones. Vino con cuerpo, estructura y un perfecto equilibrio acidez-alcohol que le aporta frescura.

Buen recorrido, largo y con una retronasal marcada por las notas de crianza. Final goloso, largo y con unas sensaciones finales de cacao que son una delicia.

En resumen un elegante vino mallorquín marcado por complejas sensaciones aromáticas, perfecto equilibrio, volumen, intensidad y recorrido.

Aún siendo un 2009 le queda tiempo en botella para limar ese tanino aún muy vivo, pero que no le resta nada para ser ahora plenamente disfrutable.

Recordar que ya está en el mercado la añada 2015, que no he probado, por si hay algún enochalado que quiera aportar sus sensaciones.

¡Salud, buen vino y cuídense!

Información y fotos de Bodegas Bordoy

Foto cata del autor.

Soto y Manrique: Cebreros time.

Soto y Manrique: Cebreros time.

Lo malo de ser un bloguero amateur es que tienes que sacar tiempo muchas veces de donde no lo hay y de ahí que no exista una periodicidad, entendida como tal, en este blog. Y si a eso le unimos un proceso gripal, pues apaga y vamonos. Pero estoy de acuerdo con uds, y no es disculpa.

No tengo el placer de concer personalmente a Jesús Soto, aunque cuando ayudaba a mi padre en el negocio familiar con esto de «los vinos», conocí su proyecto de Leda Viñas Viejas y no dudé por su calidad en incluirlo en carta del restaurante El Candil. Tuvimos ocasión de hablar por teléfono en varias ocasiones y en una de ellas me comentó su alejamiento temporal por una serie de motivos que no vienen al caso.

Después le había perdido la pista cuando probé su Naranjas Azules 2014 hace unos años y cuando hace unos meses me propuso probar sus vinos, a pesar de que sólo cato los vinos que adquiero, no pude negarme. Ya sabemos que toda regla, tiene su excepción y ésta la merecía.

Soto y Manrique.

En 2013 Bodega Soto y Manrique inicia un nuevo proyecto con su propia bodega familiar a partir de viñedos del Duero aunque en la actualidad ha terminado asentado en la localiad de Cebreros (Ávila), en la que cuenta con 20 ha. trabajadas en eco y que según sus palabras realizadas en una entrevista para www.spanishwinelover.com : “Es un lujo encontrar un pueblo en el que prácticamente todo el viñedo es muy viejo y en vaso y en el que confluyen distintos tipos de suelos a altitudes que van de los 700 a los 1.100 metros”.

Estaremos a la espera de la llegada de dos nuevos tintos parcelarios a finales de 2020 que llegarán al mercado en el último trimestre de 2020: Alto de la Estrella que se elabora con su viñedo a más altitud (1.100 metros) en suelos de pizarra y cuarzo y Las Loberas procedente de una de las parcelas más bajas (700 metros msm) sobre granito rosa.

Los vinos.

Naranjas Azules 2018

Uvas 100% garnacha de viñedos plantados en el valle del Duero en suelos muy pobres en materia orgánica, franco arenosos, sueltos, con numerosas afloraciones calizas y plantados a 780 metros de altitud. Elaborado mediante el sistema de prensado directo como un «blanc de noir», mosto blanco de uvas tintas,  y con 13% vol.

Llamativo color rosa palo pálido, muy al gusto francés y tan en boca en estos tiempos dentro de los rosandos nacionales. Limpio y brillante.

Aromas marcados por las notas de fruta roja, toques minerales y sutiles florales.

Boca con una ataque carbónico elegante, vibrante y justo para dar sensaciones de frescura. Ligero, vivo y un tanto justo en todos los sentidos que hace de él un vino fácil para un aperitivo. 7/10

La viña del ayer 2017

100% albillo real de más de 60 años sobre suelos graníticos y de pizarra. 13,5 % vol.

Fermenta en depósitos de hormigón durante 25 días con los hollejos y 3 meses de crianza en depósitos de inox.

Llamativo color amarillo dorado. Lágrima fina y lenta. Atractivo.

Compleja nariz marcada por sensaciones olfativas de membrillo fresco, miel, manzana compotada, flores de jara y cala que se dejan acompañar por recuerdos de frutos secos y notas de incienso..

Boca con buena acidez y volumen. Elegante paso de boca con tensión y frescura. Buen recorrido y una retronasal con claro protagonismo de los aromas florales y frutales al que acompañan aportes minerales (granito). Me ha gustado y mucho. 8,50 /10

La Viña del Ayer 2017

Elaborado con 100% de uva garnacha procedente de viñas viejas situadas entre 750 y 1.070 msm sobre suelos de pizarra y arena de granito, rodeadas de bosques de pinares. 14% vol.

El vino fermente a baja temperatura con una ligera maceración y extracción. Se elabora con un pequeño porcentaje de raspón. La fermentación maloláctica y la crianza la realiza en cubas troncocónicas de 10.000 l. durante 6 meses.

Precioso visualmente con sensaciones cromáticas rubíes que van dando paso a un ribete ligeramente azulado. Lágrima fina y denso. Limpio y brillante.

Aromas marcados por las notas de fruta roja, sensaciones ahumadas y sutiles aportes minerales entre los que predominan los graníticos que se conjuntan con sensaciones hebáceas aportadas por el raspón, aunque sin molestar.

Boca con buena acidez y sensaciones de taninos golosos sin ninguna agresividad que a la vez se entremezclan con los propios de la variedad. Sedoso y con buen recorrido. Elegante retronasal que lo hace adictivo. Fresco para un vino esa graduación y un equilibrio acidez-alcohol muy bien conseguido. 8/10

 

Las violetas 2017

Vino de paraje singular. Sitio de Valverde. 100% garnacha. 14,5 % vol. D.O.P. Cebreros

Viñas viejas a una altitud de 800 msm asentadas sobre suelos graníticos y pizarrosos. Crianza en fudres de 10.000 l durante 14 meses. es una viña más alta (900 metros) plantada también en granito, pero en suelos más pobres y poco profundos donde se consigue más concentración y una mineralidad más acusada.

Precioso color rubí de capa media-baja con una lágrima fina y densa.

Aromas a fruta roja acompañadas de recuerdos minerales (granito) y sensaciones florales, vainillas, especiados y recuerdos balsámicos (regaliz). Complejo y aromáticamente muy seductor.

El ataque en boca es freso, elegante y muy disfrtuable. Largo, con estructura y recorrido acompañados por un tanino sedoso y pulido. Excelente. 8,75/10

Camino de la Cruz Verde 2017

100% garnacha de entre 60 y 70 años proveniente del Sitio de Villalba-El Jorco a 900 msn. 14,5% D.O.P. Cebreros.

Crianza de 14 meses en fudres de 10.000 l. Selabora con tres viñas plantadas en suelos de granito con carácter limoso a 700 metros de altitud.

Atractiva vista destacando un color rubí de capa baja y un menisco ligeramente azulado. Precioso.

Olfativamente despliega un abanico de aromas que van de la fruta roja madura (fresa) con una punta de verdor que no molesta acompañado por recuerdos florales y puntas cítricas, sensaciones balsámicas de regaliz y notas ligeramente anisadas, junto con el aporte de arena granítico marca de la casa y que a mí, particularmente, me encanta.

Si los aromas ejercen el efecto «sirena sufrido por Ulises» -cada vez te sientes más atraído- la boca encierra el peligro de la abducción sin ninguna resistencia por mi parte. Ataque con toques de carbónico, fresco y agradable, muy buena acidez y una tanicidad aportada por la garnacha acompañada de un final ligeramente amargoso que hace que la rendición sea total.

Vino rico, fresco, complejo en aromas y muy agradable en el paso de boca que lo hacen muy disfrutable. Muy buen trabajo. 8,75

He disfurtado con sus vinos. Tal vez el que menos me ha convencio sea el Naranjas Azules, no tanto por su preciosa vista, sino por su componente aromático y gustativo. Lo veo un poco «corto» en estos aspectos. El resto,  excelentes elaboraciones que buscan un difrute directo con un trabajo tanto de garnacha como de albillo realmente bueno y si a eso le añadimos una RPD, Relación Precio Disfute, muy buena, no hay excusa.

Lo dicho, estaremos a la espera de los próximo vinos del tandem Soto y Manrique porque la verdad es que estos vinos nos han dejado muy buen sabor de boca.

¡Salud y buen vino!