
Oxer Bastegieta: el hombre que habla a la viña.
Oxer Bastegieta.
La primera vez que tuve noticias de Oxer Bastegieta me vino a la cabeza la frase que oí, creo que fue a Roberto Oliván en el programa de Orlando Lumbreras, «Placeres Mundanos» de RN3, en la que definía a España como el «Nuevo mundo dentro del Viejo mundo vinícola europeo», y no podemos negar que en la actualidad nos encontramos en uno de los mejores momentos gracias a la inclusión de viticultores -reconozco que me gusta más la palabra francesa vignerons– cuya visión del vino que quieren hacer nace en la viña.
Releyendo estos días el libro de Isidro García del Barrio Ambrosy, «La Tierra del Vino de Jerez«, hablaba de la importancia de la trilogía Planta-Clima-Suelo, algo que ha sido entendido y aplicado por mucha de la savia nueva que ha surgido en los últimos años alrededor del mundo del vino. Sin el equilibrio nada es posible, bien sea desde el origen hasta el producto final que nos deja con los ojos y la boca abiertos cual emoticón.
Cuando lees la filosofía de trabajo de Oxer y el amor por dos zonas, como son su Kortezubi familiar (Bizkaia) y Laguardia (Álava), te viene a la cabeza la canción de Alejandro Sanz, aunque él, más que roto, lo tiene dividido y por supuesto tiene «Tiritas pa este corazón partió» con los vinos que elabora en ambas zonas y que comentaremos más adelante.
Si hay que marcar dos estapas en la vida «vinícola» de Oxer una sería el año 1999 cuando su padre le pide que elabore un txakolí a partir de una ha. de viña plantada cerca del restaurente familiar y la otra, el momento de su desplazamiento a Laguardia para estudiar un máster de viticultura y enología que hace que fije allí su residencia en el 2009.
En el 2010 compra un viñedo situado a 600 msm al sr. Dañobeitia en Elvillar denominado El Artillero, nombre que recibe del apodo de su antiguo propietario, artillero en la guerra civil.
Actualmente, Oxer cultiva 4,8 hectáreas repartidas en 16 parcelas localizadas en los municipios de Leza, Navaridas, Elciego, San Vicente de la Sonsierra, Elvillar y Laguardia (donde se encuentra la bodega) y en la que ha plantado una parcela siguiendo el modelo keyline de adaptarse a la orografía del terreno (una de las técnicas utilizadas en permacultura).
Oxer lidera uno de los proyectos más atípicos y personales de Rioja, empezando por las etiquetas de sus vinos, que conforman un universo único y sorprendente, trabajando estrechamente con Calcco, un premiado estudio de diseño de Logroño, al que pide que lleve al papel los poemas, canciones e imágenes que les envía.
Los vinos.
1.- Marko 2018.
Marko da el nombre al caserío familiar y reproduce en la etiqueta pinturas rupestres de las cercanas cuevas de Santimamiñe. Está elaborado con las variedades Hondabarri Zuri Zerratia -Petit Courbu- en un 60% y con Hondabarri Zuri -Gros Courbu- en un 40%. Producción: 9.000 botellas
Producción: 9.000 botellas
Los viñedos se encuentran en Kortezubi, un pequeño pueblo de Vizcaya cercano a la costa, famoso por sus cuevas prehistóricas patrimonio de la Unesco. Suelo del viñedo arcillo-calcáreo.
Vinificación: Fermentación espontanea en depositos de inox con sus propiaslevaduras. El vino permanece 3 meses en contacto con sus lías con bâtonnages periodicos que aportan un mayor caracter.
La cata:
Amarillo verdoso brillante con lágirma fina y densa. Aromas frescos y furtales (manzana), sensaciones cítricas (pomelo) con puntos anisados y recuerdos florales intensos de azahar. En boca muestra untuosidad, tensión, complejidad, frescura y longitud.
2.- Marko Gure Arbasoak 2018.
Elaborado con un 45% de Hondarribi Zuri Zerratia (Petit Courbu), un 45% de Hondarribi Zuri (Gros Courbu) y un 10% de Izkiota Txikia (Petit Manseng) de viñedos situados en Kortezuri, cercanos a la costa, y sobre suelos arcillo-calcáreos. 13% vol.
Su nombre, al igual que Marko, está también dedicado a a casa familiar, aunque este vino va en recuerdo de los antespasados de Oxer ya que «Gure Arbasoak» significa «Nuestros Ancestros».
Vinificación: 50% con fermentación espontánea en depósitos de inox y el otro 50% fermentado en barricas usadas de roble francés de 500 l. Terminada la fermentación el vino envejecerá durante 8 meses en contacto con sus lías en barricas de roble francés usadas de 500 l.
La cata:
Amarillo intenso en vista. Limpio y brillante. Muy atractivo. Aromas protagonizados por las sensaciones de fruta blanca (manzana), toques salinos y aportes minerales acopañados de toques ahumados. Boca con excelente acidez. Se muestra largo, complejo, envolvente, cremoso y con volumen. La retronasal es pura elegancia y equilibrio con sensaciones de sapidez que le aportan frescura. Excelente.
3.- Iraun 2017
Cambiamos de zona y nos vamos a la DOCa Rioja de la mano de este vino blanco elaborado con uvas 97% viura y 3% garnacha blanca de un viñedo de 1 ha. plantado en 1919 en la localidad de Elvillar (Rioja Alavesa) a 600 msm sobre suelos arcillo-calcáreos en la que conviven viñas de tempranillo, viura y garnacha blanca, tal y como se hacía antiguamente. Rendimiento 3.000 kg/ha. 12,5% vol.
El nombre, Iraun viene del euskera del verbo Perdurar ya que Oxer plantea un vino blanco envejecido en barrica, pero en el que quiere preservar su frescura y sutileza en el tiempo.
En la etiqueta se refleja un «Oroboro«, una serpiente que se muerde la cola haciendo un guiño a la eternidad, refiriéndose a que en el principio está el fin.
Vinificación: fermentación alcohólica espontánea con sus levaduras en depósitos de inox, buscando una hiperoxidación a la hora de prensar. Una vez finalizada el vino pasa a tinajas y a barricas usadas de roble francés en las que permanecerá 12 meses.
La cata:
Color amarillo dorado, intenso y limpio. Aromaticamente despliega un abanico de aromas en el que econtramos sensaciones de fruta amarilla (membrillo, piña), toque de coco, miga de pan, mantequilla y brioche. Elegante boca que se muestra untuosa, larga, elegante, con volumen y con un ligero toque goloso al final. Excelente.
4.- Artillero 2017
Elaborado con un 100% de uvas tempranillo de la parcela de la parcela de Elvillar de la que hablamos antes en relación con Iraun. 14% vol.
Fermenta espontáneamente con sus propias levaduras en barricas usadas de roble francés de 500 l., en ánforas y en huevo de hormigón. Fermentación maloláctica en barricas usadas y crianza durante 13 meses en barricas usadas de roble francés.
Su nombre viene del antiguo propietario del viñedo, que fue artillero en la guerra civil, y se quedó con el apodo. Oxer le rinde este homenaje por el buen cuidado que le dio a esta viña de 99 años.
La cata.
Color picota de capa media-alta y lágrima fina y densa. Precioso. Aromas de fruta negra, aportes balsámicos, ligera punta de verdor, sensaciones de café, flores azules (violetas), punta de incienso, notas minerales (caliza) y recuerdos de cuero y trufa. Boca con exclente ataque y acidez que lo hace fresco, complejo, con tensión y volúmen. Exclente y compleja retronasal.
5.- Suzzane 2016
Elaborado con 100% garnacha de un viñedo situado en Cárdenas (Rioja Alta) de 3 ha y plantado en 1903 a 580 msm sobre suelos arcillo-ferrosos con algo más del 10% de piedra. Rendimientos de 2.000 kg/ha. 14,5% vol.
Su nombre se debe a la canción de Leonard Cohen en el que se realiza una oda a la mujer.
Fermentación espontánea con sus levaduras en barricas usadas y abiertas de 500 l. de roble francés, en ánforas y en huevo de hormigón. Maloláctica en barricas usadas y hormigón. Crianza durante 13 meses en barricas usadas de roble francés.
La cata:
Color picota de capa alta. Muy atractivo. Lágrima fina y lenta. Aromas complejos que van de las notas de frutas negras a los cacaos, de las sensaciones de violetas al monte bajo o de los aportes minerales a la flor de lavanda. En boca muestra un buen ataque, fresco y con un tanino al que le falta pulirse, necesitando, desde mi punto de vista más tiempo en botella. Con todo presenta excelentes mimbres para ser un gran vino con algo más de tiempo. Sí, no me lo digan, una excusa para volver a probarlo.
6.- Kalamity 2016
Elaborado con las variedades tempranillo (48%), garnacha (48%), viura (2%) y garnacha blanca (2%) de los viñedos de Elvillar ya comentado al estar plantado de forma mixta tal y como se hacía anteriormente; y de los viñedos de Cárdenas de los que hablamos al comentar Suzzane. 14% vol.
Su nombre y su llamativa etiqueta expresan la admiración de Oxer por Shakespeare. «honi soit qui mal y pense» (sobrevenga la deshonra al que malpiensa) proviene de la obra «El Reino del Rey Eduardo III».
Realiza una fermentación espontánea con sus propias levaduras en barricas usadas de 500 l. de roble francés, ánforas y huevo de hormigón. Maloláctica en barricas usadas y crianza durante 12 meses en barricas usadas de roble francés.
La cata:
Picota de capa alta, casi opaco. Lágrima densa y fina. Impresionante. Aromas complejos de fruta negra, notas minerales, cacao y torrefactos, flores azules, toques lácteos y apuntes balsámicos. En boca es largo, complejo, con excelente acidez, pero aún con dar lo mejor de sí mismo mostrándose aún potente y rugoso. Si me permiten, otro vino para recatar, porque lo que se dice prometer, promete y mucho. ¡Dejémosle un tiempo para que de lo mejor de sí!.
En resumen, un excelente recorrido por los vinos de Oxer Bastegieta marcados por castas y terruños y muy bien definidos en la parte de bodega. Txakolís que se alejan de la típica elaboración de consumo inmediato marcado por la aguja y la acidez, consiguiendo volúmen, untuosidad, complejidad y equilibrio.
En Rioja parte de un blanco combinando la crianza en madera con ánforas, y en un futuro, quizás con alguna bota jerezana, que no te deja indiferente, marcado por una magnífica acidez y una mineralidad que el aporta longitud al vino. No en vano su nombre nos habla de «eternidad».
En cuanto a los tintos son vinos vivos e intensos, complejos y en los que la fruta y las sensaciones florales se conjugan a la perfección con una crianza que «mima» las aportaciones primarias sin enmascararlas.
En defintiva un gran trabajo.
Nos quedaría hablar de un vino que elaboran a partes iguales Oxer Bastegieta con garnacha centenaria de Rioja Alavesa (viñedo del año 1.903), tempranillo muy viejo de Rioja Alta (viñedo del año 1.922), viura, garnacha blanca e Imanol Garay con aportaciones de cabernet franc, tannat, petit courbu y petit manseng, todas de origen Madiran y vinificado en Madiran.
Siento dejarles la miel en la boca, pero irá en el próximo post en el que comentaré los vinos de Imanol Garay.
Espero que no sólo hayan disfrutado con este post, sino que les animo a hacerlo también con los vinos de Oxer, alguen que hizo suyas las palabras que un día le dijo Paco Ibáñez: “No dejes de soñar nunca. Si dejas de soñar, empiezas a morir”.
Por favor, no dejen de soñar. ¡Salud y buen vino!
Fotos del autor y de noticiasderioja.com
Comentarios del personal